Cada vez estamos más concienciados de la importancia del deporte para mejorar nuestra salud en general y salud dental.
La relación entre la salud y el ejercicio físico son claras:
- Mejora nuestro sistema circulatorio y protege el corazón.
- Mantiene la densidad ósea correcta para tener los huesos sanos.
- Nos ayuda a controlar el peso, protegiéndonos de enfermedades ocasionadas por la obesidad.
- Fortalecemos también articulaciones y músculos.
- Tiene un claro efecto antiinflamatorio por lo que mejora el sistema inmunológico.
- También previene de enfermedades como la periodontitis.
- Mejora nuestra salud mental, nos libra de ansiedad y se considera una buena medicina contra la depresión y el bajo estado de ánimo.
Así que el deporte está estrechamente relacionado con nuestra salud bucodental. Si tienes mala salud dental va a afectar a tu cuerpo y a tu rendimiento deportivo.
Y es que las bacterias e infecciones que podamos tener en la boca van a impactar directamente en nuestros músculos, en las vías respiratorias, en nuestras articulaciones y al sistema cardiovascular.
Así que es fundamental mantener una correcta higiene oral para mantener el cuerpo libre de infecciones y bacterias.
Pautas a tener en cuenta al hacer deporte
Si eres un deportista profesional, aún tienes que tener más precaución, por los siguientes motivos:
- El entrenamiento constante produce deshidratación que provoca sequedad en la boca.
- La tensión psicológica constante disminuye la secreción de saliva.
- La presión de la mandíbula en momentos de sobreesfuerzo puede provocar contracturas y desgaste de las piezas dentales.
- Los suplementos alimenticios y bebidas energéticas cargados de azúcar, pueden provocar caries.
- Poner constantemente el cuerpo al límite requiere de mayor cuidado.
Es fundamental también cuidar tu dieta: una alimentación basada en cereales integrales, legumbres y frutas te darán la energía que necesitas para mejorar tu rendimiento.
Un buen nutricionista puede ayudarte a tener una dieta equilibrada, sin carencias, para mantener tu salud en estado óptimo.
Evita los azúcares y las bebidas ácidas que estropean, no solo el esmalte dental, también tu sistema inmunológico.
Visita regularmente tu clínica dental como parte de tus buenos hábitos, porque será un gran aliado para conseguir todas tus metas.
